martes, 8 de octubre de 2019

Inconsistencias en expediente apuntan a montaje de policía de Guanajuato en muerte de joven

Entre las anomalías se encuentra el reporte de un perito quien dijo encontrar el cuerpo dentro de una cocina, cuando la policía reportó el hallazgo en una carretera de Villagrán.

El expediente sobre el caso de Leonardo García -el joven guanajuatense que murió en un paraje cercano a las vías del tren rodeado por 12 policías después de un supuesto enfrentamiento- tiene inconsistencias que apuntan a un posible montaje que ocultaría una ejecución extrajudicial.  


Una de las anomalías es el reporte de un perito quien señaló haber encontrado el cuerpo dentro de una cocina, cuando la propia policía reportó que los hechos ocurrieron en una carretera dentro del municipio de Villagrán, a la altura de la comunidad El Rehilete.


“Localizado sobre el área del suelo de cocina por parte superior del inmueble y junto al muro poniente de la cocina. Inmueble localizado en la calle Nardo. En su miembro inferior izquierdo al realizar inspección del cadáver se observan a simple vista heridas por arma de fuego”, señala el documento.

Este caso, sucedido el 11 de julio pasado, desató el enojo de una comunidad completa en Guanajuato porque, según testigos, Leonardo fue víctima de una ejecución.

Ante esto, el criminólogo forense José Gutiérrez, director de la Red Internacional de Criminología, solicitó el expediente y se encuentra en proceso de realizar varias solicitudes para rearmar la investigación del caso.

Gutiérrez cree que lo del cadáver en la cocina pudo haberse tratado de un grave descuido en el que alguien simplemente colocó texto de otra carpeta de investigación. Es un error que no tumba la investigación pero sí muestra que no se realizó un trabajo acucioso.  

Después están los “focos rojos”, que son imprecisiones que desenmascaran una investigación que habría tenido el objetivo de inculpar al joven de 24 años que iba acompañado de otro más llamado Jesús, quien sobrevivió y está preso acusado de intento de homicidio sin haber disparado un arma, según el mismo expediente.


La policía informó que el 11 de julio realizaba un recorrido en Villagrán cuando detectó una camioneta con reporte de robo. Le marcaron el alto pero el conducto no accedió y aceleró. Más adelante había una caseta de vigilancia con más elementos que fueron alertados.

Según la narrativa de 12 policías estatales, los hombres frenaron antes de caer a una zanja para tratar de huir y la patrulla chocó contra ellos. Después, dos hombres bajaron de la camioneta y dispararon contra los policías. Pero en el expediente no hay ningún peritaje que compruebe que se realizó esa maniobra, y es ahí donde lo narrado por la policía va teniendo claras inconsistencias que, de acuerdo con Gutiérrez, debe volver a investigarse en terreno.

“Cómo no hay una reconstrucción de la dinámica de los vehículos, eso deja grandes incógnitas. No hay peritajes para comprobar lo que dicen los policías, no hay peritajes para comprobar lo que dicen los testigos, sin embargo, con peritajes que se pudieran realizar aún ahora, si pudiéramos establecer quién da una versión un poco más acercada a la realidad”, refiere Gutiérrez.

Los 12 policías también dijeron que en el enfrentamiento uno de los supuestos agresores era Leonardo y murió mientras que Jesús, quien siempre se colocó detrás de Leonardo sin disparar, fue capturado cuando trataba de huir.


Jesús tenía tres heridas de bala, una de ellas en el cuello pero no llamaron a los servicios médicos sino hasta después de leerle su acta de detención y sus derechos.

A Leonardo se le señala de haber disparado dos veces y su cuerpo fue presentado con una pistola de seis tiros con las municiones completas, como si no hubiera realizado ningún disparo. Aún así, en un peritaje se señala que sí disparó con la mano izquierda, aunque él era diestro.

“Y el arma que supuestamente traía Leonardo, cuando la encuentran, la encuentran con seis cartuchos útiles sin detonar. Entonces, en vez de que una evidencia física que te apunte a un enfrentamiento, te apunta a que le pusieron el arma en la mano, la accionario y entonces Leonardo se llena de pólvora una sola vez.

¿Por qué? porque ellos mencionan que ellos le disparan a Leonardo y a Jesús y la camioneta en que viajaban tiene impactos, ellos mencionan que Leonardo los agredió a balazos y las patrullas no presenta ninguna ningún daño por algún proyectil”, acota el perito.

En algunas imágenes que circularon en medios de comunicación, su cuerpo apareció esposado, con lo cual, la Fiscalía de Guanajuato, para respaldar la versión de la policía, debería comprobar que Leonardo disparó así: esposado. De lo contrario, quedaría demostrado que los elementos del orden le colocaron las esposas cuando ya estaba muerto. Es decir, se trataría de un montaje.

Otro “foco rojo” está en una reconstrucción de los hechos realizada por las autoridades y difundida en medios de comunicación donde se muestra la camioneta con reporte de robo en movimiento al momento de recibir los disparos, es decir, no habría ocurrido el choque antes del inicio de los disparos, como señalaron los policías.

Uno más está en el estado del cadáver de Leonardo, que en la autopsia presentaba golpes en la cabeza y quemaduras en el tórax. “Tiene golpes con instrumento contundente, en las fotos se puede ver los golpes que quedan en el peritaje, que no se mencionan en la narrativa de los policías”.

La muerte de Leonardo ocurrió alrededor de las 11:30 de la mañana y su cuerpo fue llevado a la morgue a las 2:47 de la tarde, con lo cual pasó expuesto más de tres horas al sol.


Ese es un argumento que fue utilizado por el médico legista para explicar por qué el cadáver presentaba graves quemaduras.

“Desfaselación epidérmica en región anterior de tórax y antebrazo derecho por tiempo de exposición postmortem al sol”, dice el expediente, es decir, “Leonardo presenta heridas en parte del pecho y antebrazo derecho y el médico legista dice que corresponden a exposición al sol por las tres horas que estuvo expuesto al sol”, señaló Gutiérrez.

Además de los peritajes que serían pertinentes, según la defensa de Leonardo, falta integrar la versión de testigos presenciales, cuyas versiones, de acuerdo con el especialista, señalan abiertamente que Leonardo fue víctima de una ejecución después de haber sufrido torturas, que incluyeron la aplicación de un líquido que le habría causado las quemaduras.

Su madre, Rebeca Aguilar, fue a reconocer el cuerpo de su hijo y sólo puso verlo del tórax hacia arriba. Ella quiere que le expliquen de dónde salieron esas quemaduras y por qué los peritajes de balística no se corresponden con las versiones de los policías ni con los de los testigos.

Leonardo Aguilar era panadero y mecánico, tenía dos hijos. De acuerdo con su madre, en su pueblo se cree que se muerte es producto del estigma con el que viven ahí los pobladores a causa de la presencia del cartel Santa Rosa de Lima, que tuvo un crecimiento exponencial gracias al robo de combustible.


Animal Político pidió versiones sobre este tema a la Fiscalía de Guanajuato y al equipo de trabajo de Comisionada de Seguridad, Sophía Huett López. Ninguna de las dos instancias respondió hasta el momento.

FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: RODRIGO SOBERANES.
LINK: https://www.animalpolitico.com/2019/10/inconsistencias-expediente-montaje-policia-guanajuato-muerte-joven/