viernes, 10 de mayo de 2019

El dolor por los hijos ausentes une a miles de madres por todo el país: unas marchan, otras buscan

Este 10 de mayo, 60 colectivos en 22 estados de la República Mexicana, integrados en su mayoría por madres de todo el país, se movilizarán para clamar por la aparición de sus seres queridos que sido víctimas de desaparición forzada y, además, exigir a las autoridades estatales y federales que haya justicia para las más de 40 mil personas ausentes que se tienen registradas. Miles de esas madres, algunas que son ahora buscadoras profesionales de restos humanos, pasarán este día, que se supone es de festejo, ya sea en las marchas de protesta que en el campo: escarbando, buscando entre la tierra a sus seres queridos.

De norte a sur, por todo el país, este 10 de mayo es la tragedia de los hijos desaparecidos la que une a miles de madres de México, quienes hoy no tienen nada qué festejar y conmemorarán el Día de las Madres en lucha: ya sea en marchas para exigir justicia a las autoridades por las calles de diversas ciudades o en el campo de búsqueda, donde incluso con sus propias manos rascan la tierra en busca de evidencias que los lleven a la localización de sus seres queridos.



En México hay más de 40 mil hijos e hijas desaparecidos, más de 40 mil madres, que este 10 de mayo se movilizan con el #10de MayoNadaQueCelebrar. Esa es la razón por la que 60 colectivos conformados por familiares de personas desaparecidas pertenecientes a 22 estados de la República y tres países de Centroamérica, realizan este viernes marchas simultáneas en diversos puntos del país, para acompañar a las madres de las más de 40 mil personas desaparecidas de las que se tiene registro.


La convocatoria busca unir a la sociedad en “un día de lucha y exigencia” para hacer de estos reclamos un suceso histórico y lograr la mayor asistencia que se haya tenido en este tipo de movilizaciones, como una señal de apoyo y solidaridad a las miles de madres que desesperadamente buscan tener siquiera una pista sobre el paradero de sus hijos.


Entre los colectivos que forman parte de este Movimiento se encuentran la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en México, la Asociación Unidos por los Desaparecidos de Baja California y El Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México que, esta mañana, marchan del Monumento a la madre hacia el Angel de la Independencia.

En Monterrey, Nuevo León, madres integrantes de la Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos de Nuevo León (AMORES), también salieron esta mañana a manifestarse por las calles del centro de la capital neoleonesa.




























Al frente madres de familia portaban una lona con los nombres de Martha Flores, Evangelina Arreola, Florentina Gamboa, Ana María Guzmán y Justina Morales Bautista.


“Hoy 10 de mayo, nos hemos reunido como lo hemos estado haciendo desde hace 10 años, pues nos quitaron el derecho de festejar el Día de las Madres con nuestros hijos, esposos y hermanos desaparecidos. “Debería ser un día de celebración para nosotras, pero nuestra situación nos obliga a pasar nuestros días haciéndonos escuchar manifestar que nuestros hijos e hijas siguen desaparecidos”, leyó la madre Virginia Buenrostro.

En la Ciudad de México, las madres gritaron: “Este día no es de fiesta, es de lucha y de protesta”, “Hijo, escucha, tu madre están en la lucha”, “Dónde están, dónde están, nuestros hijos dónde están”, y “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”. Cientos de ellas salieron del Ángel de la Independencia con la misma exigencia que han hecho durante años: que las autoridades ayuden plenamente a encontrar a sus hijos desaparecidos.

Antes de iniciar la caminata, el padre Raúl Vera López, Obispo de la Diócesis de Saltillo, Coahuila, dirigió unas palabras a los familiares y a la opinión publica.

“En este momento, la razón de la desaparición forzada, junto con todos los asesinatos que se han dado a lo largo y a lo ancho del país con la excusa de la guerra contra el crimen organizado, nosotros sabemos que es un táctica política clara de control de población, de amedrentamiento y terror para nosotros. Y por eso la historia de impunidad que ha escrito la desaparición forzada en México en los últimos años de la vida del país, y no son pocos: llevamos dos sexenios padeciendo, junto con otro tipo de crímenes, uno de ellos es la colusión con el crimen organizado que les ha llevado a hacer toda clase de tropelías.

“Esto, y que lo tenga bien claro el señor Presidente de la República en este momento, que tenga bien claro que esto tiene que parar, es la destrucción del país. No es posible que estos ciclos de impunidad, cínicos ciclos de impunidad, de criminalidad, se sostengan”, dijo al padre Vera López.

Usted ha pedido, expuso refiriéndose a Andrés Manuel López Obrador, que su pueblo entre en la gobernanza. “Pues aquí tiene puntos muy concretos y muy claros, señor Presidente, para enfrentar uno de los problemas más lacerantes”, dijo el sacerdote católico señalando un papel con las exigencias de los familiares de los desaparecidos en todo el país.
LAS CARAVANERAS MICHOACÁN


En Caleta de Ocampo, Michoacán, las decenas de madres mexicanas que integran la Quinta Caravana Internacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas estarán hasta el próximo 12 de mayo concentradas en una zona donde ya han encontrado evidencias, como piezas óseas, ropa, documentos zapatos.

Entrevistadas por SinEmbargo, Bertha Corona Bandera, Luz Elba Hernández, Reyna Becerra García, María Victoria Romero Juárez, Dionisia Pelcastre Vadillo y Teresa Rendón González coinciden que mientras sus hijos no aparezcan ellas no tienen nada qué festejar este 10 de mayo, pero tampoco en navidades, años nuevos o cumpleaños.

“Voy a pasar el día en las calles, con una esperanza de encontrarlo, con la esperanza de que se nos quite este vacío. Yo voy a buscarlo hasta que Dios me de fuerza”, dice María Victoria.

“Yo no festejo nada, no festejo 10 de mayo hasta que halle mi hijo, hasta que sepa algo de él, que sepa qué hicieron con él, dónde me lo dejaron”, comenta Teresa.

Reyna afirma: “Yo voy a estar buscando a mi hijo hasta que Dios diga, hasta que pueda caminar, lo voy a buscar hasta el final”.


“Tengo más hijos y yo sé que ellos quisieran estar conmigo este día, pero es muy triste para mí, no puedo festejarlo en ningún sentido”, expresa Dionisia.


UNA GUERRERA BUSCADORA EN SONORA

Guillermina Girón Quintana, de 38 años, es hoy integrante del colectivo Guerreras Buscadoras de Sonora. Esa organización es hoy el centro de su vida. Lo mismo Da entrevistas, que organiza a sus compañeras y atiende a las personas que a diario le piden información. La desaparición de su hijo José Cristian la orilló a dejar su trabajo en la limpieza de casas, para dedicarse a su búsqueda y, al tiempo, ser una activista de tiempo completo.


Con el dolor a cuestas, Guillermina dice que no tiene otra opción que mantenerse firme no sólo para encontrar a su hijo desaparecido, sino para conservar de pie a su familia: un esposo y cuatro hijos más.

Ahora, con todas las responsabilidades que ha asumido y aunque no lo desea, se perfila como la coordinadora de la extensión Hermosillo de ese colectivo, para acompañar y apoyar a María Teresa Valadez Kinijara, líder de las Guerreras a nivel estatal, agrupación que se dedica a buscar a personas víctimas de desaparición forzada en fosas clandestinas.

“Yo preferí dejar de trabajar, porque ahorita me importa más estar en esto, en la búsqueda de mi hijo”, narra Guille en la cocina de su casa, sentada sobre un mueble adornado por imágenes de la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo. “Va a ser mi primer 10 de mayo que voy a estar pasando esta situación”.

José Cristian Piña Girón, de 21 años, desapareció el 30 de agosto de 2018. Fue “levantado”, cuando iba a visitar a una amiga suya.

Este 10 de mayo, Guille marchará en las calles de Hermosillo por primera vez en su vida. Nunca había sentido la necesidad de hacerlo, pero ahora, con una causa que es suya y de muchas otras mujeres en Sonora, está segura de que este Día de las Madres, no tiene nada que celebrar.

“Marcharemos de la plaza Emiliana de Zubeldía hacia Catedral, donde tendremos una misa para recordar a nuestros tesoros y, quien quiera, puede sumarse”, invitó, “es una marcha pacífica, es importante ir”.

“Ya después le daré una vuelta a mi mamá, pero ya no será como antes; siento esa tristeza de no saber de un hijo tuyo; te cambia la vida”, dice Guille.

LAS MADRES DE SINALOA BUSCAN SOLAS


En Sinaloa, cada día que avanza más mujeres se unen a unos de los 12 grupos que existen para buscar a sus hijos y exigir la verdad sobre lo que les pasó y en medio del dolor a veces también sufren el abandono de sus parejas, ante la impotencia de no poder enfrentarse a lo que están viviendo.

La secretaria general de los Sabuesos Guerreras, Martha Beatriz Vega Ruiz, estima que del totalidad de personas que se encuentran en estos grupos, como las más de 100 en el suyo, el 98 por ciento son madres de familia y en algún momento terminan por ser abandonadas por sus parejas.

“La mayoría, digamos que el 98 por ciento son madres; algunas otras son esposas, otras son hermanas, son tías, son sobrinos… el 98 por ciento son madres”, dice Vega Ruiz.

Este 10 de mayo “es un día muy triste, muy amargo, como para festejar algo, continuar, porque en la vida no se detiene por nada, la vida te exige vivirla, entonces hay que vivirla, hay otros hijos que no podemos olvidar ni dejar de lado, porque los otros también están sufriendo la ausencia del hermano”.

“El papá que también siente igual que la madre, pero en muchos casos, desgraciadamente, no ha sido así, ha sido una falta de solidaridad del padre, en algunos casos muy tristes, incluso la madre se ve abandonada por el esposo, porque no puede manejar el dolor, la pena, no puede enfrentarse a la situación de la desaparición del hijo ni a lo que conlleva, tantas cosas que hacer ante el Ministerio Público, que tienen que faltar a trabajar, que tienen que atender otra situación que no está en sus manos”, afirma.


Vega Ruiz, de 68 años, busca a su esposo Jesús Cutberto Martínez Meza, un ex escolta de un Gobernador de Sinaloa que fue detenido por militares y ya no supo más de él.


EN COAHUILA, AÑOS DE LÁGRIMAS Y BÚSQUEDA

Una representación de las madres del colectivo Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila estará este martes en la Ciudad de México para marchar sobre la Avenida Reforma para clamar por el paradero de sus seres queridos y exigir justicia.

El 10 de mayo se ha convertido para ellas en un día de lucha y no de celebración. Lourdes Herrera, madre de Brandon Acosta Herrera, desaparecido a los 9 años de edad desde agosto de 2009, dijo que además de la manifestación sobre la búsqueda de sus hijos, a la marcha ­–que se replicará en distintas partes de la República Mexicana– también se lleva la exigencia de verdad y justicia.

Las madres no cejan en la búsqueda de sus hijos –algunas con años ya en esta batalla– ni tampoco en sus reclamos a las autoridades: “¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, reclaman.

UN ENCUENTRO NACIONAL GUERRERO

Mujeres familiares de desaparecidos solicitaron al presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (Codehum), Ramón Navarrete Magdaleno, que intervenga para que la Fiscalía y el Gobierno de la entidad informen de los avances en la identificación de restos humanos hallados en fosas clandestinas en los últimos años, y cuántos han sido entregados.


En la víspera del Día de las Madres, integrantes de los colectivos Madres Igualtecas, Familias de Acapulco en Búsqueda de sus Desaparecidos y Familiares de Personas Desaparecidas y Asesinadas en Chilpancingo tuvieron un encuentro en las instalaciones del Centro de Derechos Humanos Minerva Bello de Chilpancingo.

La representante del Colectivo de Chilpancingo, Gema Antúnez Flores, dijo que se debe dar a los colectivos un informe de los estudios de ADN de los restos encontrados en fosas clandestinas, “se supone que debería de ser en tres meses, pero se incumple”.

Además, exigió, debe conocerse cuántos cuerpos o restos han sido entregados a sus familiares, “si hay seguimiento y si realmente esos resultados de Guerrero se están yendo a la base de datos de la Ciudad de México”.

La mujer llamó a no criminalizar a los desaparecidos, y que el dolor que sientan ellas no pase desapercibido por otras familias, porque mañana pueden ser ellos los que estén buscando a un ser querido. “No pedimos compasión. Tenemos que cuidarnos mutuamente y no callar”.

La señora Judith Tapia quien busca a su esposo desaparecido en Coahuila pidió a la comunidad que sea sensible y que no las miren mal, porque el dolor que sufren es muy grande.

“Al pueblo de Chilpancingo decirle que no descuide a sus hijos, que siempre les pregunten en dónde están, a qué horas van a llegar, que siempre estén atentos a ellos porque tampoco ustedes saben cuándo y a qué horas puede suceder esto (la desaparición) y pueden formar parte de nuestra familia, y que sus hijos se comuniquen constantemente con ustedes”, expuso.


“Hoy en estos tiempos no es la misma ciudad como estábamos nosotros en nuestra niñez, en nuestra adolescencia, ahora son tiempos difíciles y hay mucha gente que no tiene conciencia de la situación y hace mucho daño a la sociedad, dejan a familias enteras sin padres, hermanos y nos dejan sin hijos. Estén atentos con sus hijos para que no corran lo mismo que nosotros estamos pasando”, agregó.

FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: https://www.sinembargo.mx/10-05-2019/3578780