jueves, 16 de agosto de 2018

Investigan la muerte de un centenar de tortugas en litoral de Chiapas

Sin conocerse la causa aún, más de 100 tortugas han muerto en las últimas semanas a lo largo de 20 kilómetros del litoral chiapaneco. Al menos así lo han reportado a las autoridades ambientales, los pecadores y pobladores de la región de Puerto Arista, municipio de Tonalá.
Sin el suficiente recurso humano y de laboratorio para investigar el origen de este fenómeno, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) iniciaron un monitoreo para indagar la muerte de tortugas de las especies golfina, alud, prieta y carey, estas últimas en peligro de extinción.
Desde el 25 de junio, a lo largo de unos 30 kilómetros del litoral chiapaneco, pescadores de la región de Puerto Arista, Boca del Cielo, Cabeza de Toro, Echeverría y otros poblados de pescadores empezaron a encontrar cadáveres y restos de tortugas en descomposición.
Los hallazgos fueron reportados al centro de monitoreo de la zona conocida como Santuario Puerto Arista, en el municipio de Tonalá, donde se tiene el reporte de unas 105 tortugas muertas encontradas desde el 25 de junio a la fecha.
Tras una reunión de emergencia realizado el pasado viernes, los miembros del centro de monitoreo detectaron que al menos 15 de las tortugas fallecieron por redes o mallas de pesca, pero de los otros 90 ejemplares aún desconocen sus causas.
En esa reunión de emergencia donde estuvieron representantes de la SEMARNAT, la PROFEPA y Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), se señaló que una posible causa de muerte, podría ser que las tortugas hayan sido afectadas por alguna bacteria.
La semana pasada, el delegado estatal de la SEMARNAT, Antonio Lorenzo Guzmán, arribó al poblado de Paredón, para inspeccionar la zona y charlar con los pobladores. En su recorrido detectó a cazadores furtivos que llevaban una tortuga. Intercedió para que la dejaran libre. Alegaban que la tortuga les había roto una malla de pescar y que sería sacrificada.
Afortunadamente cedieron, fue llevada al campamento Tortuguero y estuvo en rehabilitación hasta ayer que fue liberada en la playa.
Mientras tanto siguen con el monitoreo y las autoridades ambientales han pedido ya el apoyo de las Universidades y las oficinas centrales de estas dependencias ambientales para que se les apoye en las investigaciones.

FUENTE: PROCESO
AUTOR: ISAIN MANDUJANO