lunes, 23 de octubre de 2017

Capos colombianos “Don Diego”, “Chupeta”, “Don Efra”, “Pacho”, entre otros, testificarán contra “El Chapo”

El Buró Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés) reclutó a un grupo de narcotraficantes colombianos extraditados a aquel país -entre ellos Diego León Montoya Sánchez, alias “Don Diego”, exjefe del Cártel del Norte del Valle-, que testificarán contra el capo sinaloense Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, “El Chapo”.

Según el diario El Tiempo de Colombia, que difundió la información, la intención del FBI es garantizar que el gran jurado otorgue cadena perpetua al ex líder del Cártel de Sinaloa, extraditado a los Estados Unidos desde el 19 de enero pasado, donde permanece recluido en el Centro Metropolitano de Detenciones de Brooklyn, en Nueva York.

El rotativo abundó que el Gobierno estadounidense aún no ha anunciado de forma oficial, los nombres de los líderes de cárteles colombianos que van a testificar sobre los envíos a Guzmán Lorea, a través de rutas aéreas, marítimas y terrestres.

Según El Tiempo, “Don Diego” asegura que el capo mexicano le compraba 15 toneladas de coca al año, y que la mayoría de la droga era transportada en aviones King Quest, Grumman, Commander y Convert y aterrizaba en los aeropuertos de Los Mochis, Torreón y Veracruz.

Diego Montoya, también con el alias de “El Señor de la Guerra”, tiene en su poder nombres de ingenieros rusos y estadounidenses que ensamblaban submarinos para el trasiego de droga desde Colombia a las costas mexicana del Pacífico, a petición de “El Chapo”, señaló el medio colombiano.

La intención de llevar dichos submarinos clandestinos por dichas rutas, sería proveer a los hermanos Beltrán Leyva, a Ismael Zambada García, alias “El Mayo”, y al expolicía Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”, indicó El Tiempo.

El rotativo abundó que otros narcotraficantes colombianos Efraín Hernández Ramírez, “Don Efra”; Elizabeth Montoya de Sarria; Iván Urdinola Grajales, Arcángel Henao Montoya; Francisco Iván Cifuentes Villa, “Pacho Cifuentes”; Miguel Solano, “Miguelito”; y Luis Giovani Caicedo Tascón, entre otros.

“Muchos fueron asesinados, pero otros sobrevivieron a ‘vendettas’, como Juan Carlos Ramírez Abadía, ‘Chupeta’, quien va a colaborar”, le dijo un agente del FBI a El Tiempo, sobre quien fuera un presunto gran proveedor de “El Chapo”.

Según el rotativo, “Chupeta” afirmó que el ex líder del cártel de Sinaloa secuestró a uno de sus emisarios tras una disputa por un cargamento. Se trata de Juan Carlos Ortiz, alias “Cuchilla”, acribillado y muerto en Cali, Colombia, tiempo después.

El diario señaló que estableció que a la lista de testigos se unen Luis Caicedo Velandia y Julio Lozano Pirateque, jefes del narcotraficante Daniel “El Loco” Barrera Barrera. “Sus testimonios son claves porque demuestran que el capo mexicano mantuvo su imperio y sus nexos con la mafia colombiana hasta hace tres años, cuando cayó en manos de la Marina mexicana”, indicó El Tiempo.

Por ejemplo, abundó el medio colombiano, el único beneficio que Caicedo y Lozano obtendrían por ayudar a hundir a “El Chapo” sería el de quedarse en Estados Unidos. Por su parte, “Don Diego”, condenado a 45 años por el asesinato de un testigo federal, también es poco lo que puede obtener.

El capo colombiano tiene 59 años de edad, lleva 8 en prisión y saldría a los 96. Si acaso le darían mejores condiciones carcelarias debido a sus líos de salud, que ya lo tienen en una cárcel de mediana seguridad, indicó El Tiempo.

Por su parte, “Chupeta”, después de ser extraditado a Estados Unidos por el gobierno de Brasil, en el 2008, enfrenta una sentencia de 25 años, de los cuales le quedan 14 pendientes. Si bien los podría reducir delatando a “El Chapo”, el beneficio por ello sería mínimo, finalizó el rotativo.

Se espera que el juicio contra el capo sinaloense comience en abril del 2018. Sus abogados son Jeffrey Lichtman, Eduardo Balarezo y William Purpura, tres antiguos defensores de narcotraficantes, quienes ya pidieron la anulación del juicio contra Guzmán Loera, argumentando que su extradición fue “ilegal y con base en afirmaciones falsas”.

FUENTE: SEMANARIO ZETA.
AUTOR: CARLOS ÁLVAREZ.