viernes, 24 de abril de 2015

Veda electoral: la ‘delgada línea’ entre la censura y prohibir la propaganda

En los tres órdenes de gobierno están negando información a medios de comunicación con el pretexto de que hay veda electoral. Pero, ¿qué dice la ley?

En la Secretaría de Educación Pública es imposible confirmar un dato sobre gasto en educación superior; el alcalde de Tijuana suspendió las conferencias de prensa y en Nuevo León no se pueden consultar los discursos del gobernador. Todo, por la veda electoral.

O al menos eso es lo que dicen en diferentes oficinas de comunicación social de los tres órdenes de gobierno que, con motivo de la veda electoral, han dejado de dar información a medios de comunicación.

Pero, ¿qué es y qué no la veda electoral? El artículo 41 de la Constitución cita: “Durante el tiempo que comprendan las campañas electorales federales y locales y hasta la conclusión de la respectiva jornada comicial, deberá suspenderse la difusión en los medios de comunicación social de toda propaganda gubernamental”.

Y agrega como excepciones “las campañas de información de las autoridades electorales relativas a servicios educativos y de salud o las necesarias para la protección civil en casos de emergencia”.

Como la ley señala, lo que está prohibido durante la veda electoral es la propaganda –entendida como un mensaje que tiene una intención para convencer– y no la información.

“Los gobiernos locales y federales se la pasan haciendo propaganda, esos mensajes para convencer a la ciudadanía de que están trabajando y de que todo lo hacen bien, escuchar un promocional de ese tipo sería ilegal ahorita. La veda es en contra de esa propaganda pero nada tiene que ver con no responder solicitudes de información, preguntas de medios de comunicación”, dijo Javier Aparicio , profesor-investigador de la División de Estudios Políticos del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).

El trabajo periodístico, detalla Aparicio, debe ser independiente de la propaganda: información pagada por el interesado en su divulgación; y las instancias de gobierno deberían responder a los medios de comunicación.

“Sería lamentable que la veda electoral se esté usando como una forma de censura, limitar el trabajo periodístico o para negar información pública”, dijo el experto en derecho electoral.

Por su parte, en el Instituto Nacional Electoral (INE) dijeron que el acuerdo aprobado en febrero pasado sobre veda electoral es claro y se limita exclusivamente a la propaganda, por lo que no pone en riesgo la libertad de expresión y de prensa; pues no tiene vínculo con el trabajo periodístico.

Lo que sí se establece el Acuerdo es qué tipo de mensajes propagandísticos están exentos de la veda electoral, entre los que se encuentran los de Lotería Nacional, Pronósticos para la Asistencia Pública y la Secretaría de Gobernación en temas de juegos y sorteos.

La promoción turística a través de la Secretaría de Turismo y Fonatur; mensajes de la Secretaría de Hacienda para los contribuyentes; campañas de vacunación y cuidado de la salud; programas de orientación educativa, igualdad de género y defensa del consumidor y contribuyente; campañas ambientales, de cuidado del agua y de prevención de incendios.

Así como información sobre eventos culturales a cargo del INBA, Conaculta y el Fondo de Cultura Económica; las campañas de no discriminación del Conapred y de seguridad en periodos vacacionales a cargo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

Además, los sitios web con información gubernamental se deben modificar para evitar mensajes propagandísticos y advertirlo con una leyenda: El contenido de este sitio ha sido modificado temporalmente en atención a las disposiciones legales y normativas en materia electoral, con motivo del inicio del periodo de campaña.


Según el INE, lo que se regula tanto en esos sitios web como en medios de comunicación es que los mensajes sean de “carácter institucional y abstenerse de incluir frases, imágenes, voces o símbolos que pudieran ser constitutivos de propaganda política o electoral, o bien elementos de propaganda personalizada de servidor público alguno”.

FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: TANIA L. MONTALVO.

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