AUTOR: HERMANN BELLINGHAUSEN.
“El 1 de enero de 1994, el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) se levantó en armas en contra del gobierno mexicano y el Ejército federal, a favor de las comunidades indígenas y del pueblo de México. A partir de entonces el Estado puso en marcha el Plan de Campaña Chiapas 94, con el objetivo de acabar al EZLN. Con esta estrategia contrainsurgente se incrementó la militarización en las zonas Selva, Norte y Altos en el estado de Chiapas así como las violaciones de derechos humanos contra la población, principalmente indígena”.
Esta estrategia, añadió el representante tzotzil, contempló la paramilitarización, “que consiste en utilizar a nuestros propios hermanos indígenas para hacer el trabajo sucio del Ejército y la policía, como cometer ejecuciones, desapariciones forzadas y desplazamientos forzados”. Así, la violencia aumentó entre los años 1995 y 2000 en la zona Norte, tradicionalmente chol, “con la actuación del grupo paramilitar Desarrollo Paz y Justicia, responsable de 37 desapariciones y 85 ejecuciones”.
En los Altos, un grupo paramilitar afiliado al Partido Revolucionario Institucional (PRI) “cometió desplazamiento forzado de miles de personas y asesinatos”. La “estrategia de muerte” se “visibilizó” con la masacre de Acteal el 22 de diciembre de 1997. Los paramilitares “fueron identificados”. Además “actuaban con armamento de uso exclusivo del Ejército mexicano, con la anuencia y protección de los diferentes niveles de gobierno municipal, estatal y federal”.
El actual representante de Las Abejas recuerda: “Ante las constantes denuncias dadas a conocer tanto públicamente como ante las instancias de procuración de justicia, el gobierno no actuó, y aumentaron las violaciones a derechos humanos cometidas tanto por los grupos paramilitares como por la policía y el Ejército federal”. Aquello originó más de 12 mil desplazados “tan solo en las zonas Norte y Altos de Chiapas”, quienes huyeron “ante las constantes ejecuciones, desapariciones, quemas de casa, robo de cosechas, saqueos, hostigamientos, intimidación, detenciones arbitrarias y torturas". Hasta hoy, estos hechos "permanecen en la impunidad”.
En la sesión del TPP, adelanta Gómez Hernández, se presentarán los asesinatos, también impunes, ocurridos el 13 de noviembre de 2006 en el poblado tzeltal Viejo Velasco, en la selva Lacandona, dentro del municipio de Ocosingo. “Hasta el momento no se ha dado con el paradero de dos de los cuatro desaparecidos”, a los que se suma el asesinato de otras seis personas durante aquel ataque policiaco. De los otros dos desaparecidos, fueron encontrados sus restos óseos.
Con el pretexto de expulsarlos de la reserva de Montes Azules, endosada por el gobierno a la denominada “comunidad lacandona”, se provocó el desplazamiento de sus habitantes, “en el contexto de la lucha por la reivindicación del derecho al territorio y al resguardo y manejo de los recursos naturales de las comunidades asentadas en la selva Lacandona".
Para Las Abejas, será “un hecho histórico” la presentación de estos testimonios en la preaudiencia del TPP “capítulo México”, donde “la palabra de sobrevivientes, testigos y familiares sobre las graves violaciones a derechos humanos” cometidos en la Zona Norte, Acteal y Viejo Velasco llevará “la exigencia de justicia y verdad”.
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