miércoles, 27 de noviembre de 2013

Fundamental, una “revolución” en materia de transparencia en México

FUENTE: REVOLUCIÓN 3.0.
AUTOR: ANTONIO JIMÉNEZ.

(26 de noviembre, 2013).- Durante el foro Herramientas para una mejor gestión del desarrollo a partir de la relación gobierno-sociedad, Patricio Ballados, director del Programa de Gobernabilidad Democrática del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) México, señaló que en nuestro país es necesario llevar a cabo una revolución en materia de transparencia, pues es fundamental que los ciudadanos sean conocedores de lo que se gasta y dónde se gasta el presupuesto público.

También subrayó que los aportes de la sociedad activa –ya sean organizaciones de la sociedad civil, la academia o la ciudadanía general– tienen que ser reconocidos por los gobiernos, pues aunque el desarrollo del país es un compromiso inalienable del gobierno para fortalecer la democracia, debe haber una cooperación integral entre todas las esferas del Estado, y por ello debe abrirse la información gubernamental al escrutinio público como forma de robustecer la democracia.

Y es que ante la cercanía de la fecha para el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo del Milenio –asumidos por México en el año 2000– se depende en buena medida del buen actuar gubernamental y del uso de los recursos públicos en políticas sociales.

“De ahí que, por ejemplo, en materia de política social y superación de la pobreza nos enfrentamos a temas como la necesidad de que en la agenda del gobierno las decisiones tengan claridad en los resultados esperables y en los responsables de alcanzarlos, y que esto sea aplicable en todas las vertientes del gasto público, que este ejercicio de recursos se dé con transparencia del gasto federalizado”, enfatizó Ballados.

Precisó que la agenda del desarrollo después del 2015 ofrece una gran oportunidad para integrar la gobernabilidad como un factor primordial para eliminar la pobreza y promover el desarrollo.

Explicó que para la Agenda Post2015 ya se ha incluido como objetivo garantizar la buena gobernanza e instituciones eficaces. En los últimos años la gobernabilidad democrática ha concedido un mayor acercamiento entre el gobierno y la sociedad civil en temas como derechos humanos, ejercicio del voto, salud, educación, economía, acceso a agua, combate a la corrupción, cambio climático y medio ambiente, entre otros.

Por último, Ballados añadió que la forma en la que se relacionan los gobiernos con sus ciudadanos depende del uso adecuado de los recursos, de construir capacidades institucionales para la entrega de servicios de calidad en un entorno de eficiencia de gasto, transparencia y rendición de cuentas, y también depende de la participación activa de la comunidad en los asuntos públicos.

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