AUTOR: GEORGINA HOWARD.
A pesar de la controversia y de la oposición de varios sectores, el megacentro de distribución Dragon Mart comenzará a construirse en Cancún, con la venia de los magistrados.
Sus alas se preparan para iniciar vuelo este mes y la amenaza de un incendio ambiental y económico se respira cada día en el municipio de Benito Juárez.
Es Dragon Mart, el megaproyecto comercial que comenzará a construirse en la ciudad de Cancún, con la venia de los magistrados de la entidad –Quintana Roo-, a pesar de la oposición de muchos sectores.
Julián Ricalde, presidente municipal, se negó a entregar la licencia de construcción a la empresa Real State Cancún que representa, Juan Carlos López Rodríguez. La orden vino de más arriba.
La Sala Constitucional y Administrativa del Tribunal Superior de Justicia de Quintana Roo autorizó la viabilidad del proyecto.
Desde hace más de dos años los responsables de Dragon Mart Cancún estaban en el “estire y afloje” con las autoridades locales y municipales para obtener las licencias.
Hoy, es una realidad y las primeras piedras comenzarán a colocarse en el terreno este mes. A pesar de que China tiene la mayor cantidad de demandas y quejas antidumping en la Organización Mundial de Comercio.
De acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad, la construcción de este megaproyecto alterará el equilibrio de la región donde se encuentran más del 50 por ciento de los manglares existentes en México.
Para la presidenta de la Comisión Especial de Cambio Climático en el Senado, la panista Silvia Garza Galván, el proyecto es inviable porque atenta contra la protección, restauración y conservación del manglar.
Si Dragon Mart se construye “estaremos ante un inminente daño al ecosistema de manglar de Quintana Roo y a parte de la Península de Yucatán”, dijo.
Desde 2007 se establece en el artículo 60 de la Ley General de Vida Silvestre establece que: “Queda prohibida la remoción, relleno, transplante, poda, o cualquier obra o actividad que afecte la integralidad del flujo hidrológico del manglar, del ecosistema y su zona de influencia”.
Sin embargo, la respuesta de las autoridades es nula ante los intereses que ya se juegan en este proyecto.
Se frontan las manos
De acuerdo a la revista local Luces del Siglo, los tres sindicatos de la construcción “se frotan las manos” para ver cuál será el elegido para iniciar la primera fase de la construcción que durará 16 meses.
En el sitio oficial de la empresa Real State Cancún, su director general, Juan Carlos López Rodríguez garantiza que los trabajos iniciales los hará una empresa local y garantiza que en ese lapso se generarán mil 600 empleos temporales.
El representante del Sindicato de Trabajadores, Obreros y Empleados de la Construcción (SITEC), José Juan Chilón Colorado, asegura que prácticamente ya se tiene todo amarrado para entrar de lleno a la edificación del Dragon Mar
Según Chilón, se contratarán mil 800 trabajadores en la primera etapa, ocho mil 500 en dos años de obra.
Presentan denuncia
El senador Daniel Ávila Ruiz presentó ante la Profepa una denuncia para que se realice una evaluación sobre el impacto ambiental de Dragon Mart Cancún.
En la denuncia se pide investigar si realmente existe la autorización del Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales.
Y se pide que la empresa encargada se someta a una Evaluación de Impacto Ambiental Federal ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, por tratarse de un desarrollo inmobiliario que afecta un ecosistema costero.
Aunque la empresa presentó una Manifestación de Impacto Ambiental de una firma privada, la Planta Potabilizadora de Agua y la de Tratamiento de Aguas Residuales que se pretenden construir puede causar un desequilibrio ecológico.
El proyecto
> Se trata de un inmueble con 12.7 hectáreas de área de exhibición, cuatro hectáreas de bodegas para almacenaje, 722 viviendas, 38 hectáreas para futuras bodegas.
> Tendrá una explanada de 6.5 hectáreas para eventos temporales y 40 hectáreas de parques públicos, centro de negocios, bancos- y restaurantes.
> Comprende 127 mil metros cuadrados de área de exhibición donde se ubicarán tres mil 40 locales de dos mil empresas.
> Habrá 20 mil metros cuadrados de área de almacenaje en dos naves y 102 mil para la zona residencial, donde se construirán 742 viviendas de 100 metros cuadrados para los administradores chinos que vendrán con las empresas.
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