Mientras los funcionarios del estado son perseguidos por enriquecimiento ilícito, la pobreza y las carencias golpean la entidad del sur del país.
Según el Informe de Pobreza y Evaluación en el Estado de Tabasco 2012, del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en el estado, 57.3 por ciento de la población vive en pobreza.
De esta cifra, 13.6 padece condiciones de pobreza extrema, es decir sin recursos para satisfacer sus necesidades alimentarias y no alimentarias, reporta el organismo que depende de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
En el estado, el municipio con más carencias es Huimanguillo, cuyo presidente municipal es el priista Francisco Sánchez Ramos.
En cuanto a pobreza extrema, el estado rebasa la media nacional, que es de 11.4 por ciento del total de la población.
Éste es el escenario de un estado en el que los funcionarios del ex gobernador Andrés Granier enfrentan procesos por enriquecimiento ilícito.
Su ex secretario de Finanzas, José Manuel Sáiz, fue exhibido por poseer un Ferrari de más de 4.6 millones de pesos.
Mientras que Granier admitió esta semana una fortuna de 25 millones de pesos, formada por una casa en la Ciudad de México y un departamento en Miami, entre otras propiedades.
Según el Índice de Desarrollo Humano, publicado por Naciones Unidas, Tabasco se encuentra en un nivel de marginación alto, como Michoacán, Hidalgo, Puebla y San Luis Potosí.
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