Tras impugnar legalmente los nuevos estatutos de la bancada, legisladores afines a Ernesto Cordero se retiraron de la mesa de negociación que habían acordado con Jorge Luis Preciado.
Tras la decisión de la actual dirigencia de impugnar legalmente los nuevos estatutos de la bancada y después de 24 horas de negociación, los representantes corderistas decidieron levantarse de la mesa sin firmar la nueva propuesta de reforma a los estatutos.
Alrededor de las 22:00 horas, el senador Roberto Gil abandonó la mesa de diálogo sin comprometerse a aceptar los cambios pactados.
Tras la decisión, el vicecoordinador José María Martínez informó a la dirigencia y el Comité Ejecutivo Nacional interpuso un recurso en contra de los senadores.
En días anteriores, “corderistas” y “maderistas” habían iniciado contacto para buscar una solución a esta crisis interna, que ya derivó en demandas ante el Ministerio Público y la intervención de un notario.
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