Familiares de las víctimas del incendio en Hermosillo, Sonora, conformados en el movimiento “Manos Unidas“, lograron que la Procuraduría General de la República abriera una nueva línea de investigación, que tiene como punto de partido un incendio provocado.
La denuncia, en poder de Aristegui Noticias, entregada a la PGR hace poco más de un mes indica que “el incendio suscitado el día 5 de junio del año 2009 en la bodega que estaba al servicio de la Secretaría de Hacienda del gobierno del estado de Sonora, cuya propagación al lugar donde estaba la guardería ABC produjo la muerte y lesiones de nuestros menores hijos, no se trató de un hecho accidental o fortuito, sino que, por el contrario se trató de un hecho intencional, ordenado y dirigido por un alto exfuncionario del gobierno del estado de Sonora en el sexenio del exgobernador José Eduardo Robinson Bours Castelo”.
Los padres de las víctimas señalan directamente a Juan Carlos Lam Félix, quien se desempeñó como Secretario Técnico del gobernador, y habría sido quien dio la orden de destruir “información documental relacionada con la deuda de 10 mil millones de pesos, generada en ese sexenio por el Plan Sonora Proyecta, que fue el principal programa de obras de ese gobierno”.
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