AUTOR: Roberto Garduño y Enrique Méndez.
La Mesa Directiva decretará un receso para dar tiempo a que coordinadores resuelvan diferencias. El presidente de la Cámara, Francisco Arroyo, no descartó que la aprobación pudiese ocurrir hasta la Semana de Pascua.
Hasta el momento no se allana un acuerdo entre los partidos, pues persiste diferendo en la redacción que acotaría la participación de los actores preponderantes en el ámbito de la televisión por cable y satelital.
Se prevé que la mesa directiva decrete un receso para dar tiempo a los coordinadores a resolver sus diferencias y concretar la redacción final de la reforma con proyecto de decreto.
Sobre el particular, el presidente de la Cámara, Francisco Arroyo Vieyra, expuso que en las próximas horas continuará la sesión, y en cuanto la Junta de Coordinación le informe de que ha concluido la redacción de la iniciativa, ésta será incluida en la orden del día y así arrancar con la discusión y debate de la propuesta.
No descartó que la aprobación de la reforma pudiese ocurrir hasta la Semana de Pascua, no obstante enfatizó en que persiste el ánimo entre los coordinadores y él por que se resuelva en las próximas horas el diferendo.
También el coordinador parlamentario del PAN, Luis Alberto Villarreal y presidente de la junta de coordinación política, confirmó que de no cerrarse la negociación en las próximas horas se decretará un receso, “pero hoy vamos a discutir el dictamen a la ley de telecomunicación”, la idea, dijo Villarreal, es que se presente un un documento conjunto avalado y suscrito por las fracciones parlamentarias del PRI, PAN y PRD.
Se negó a explicar el fondo del diferendo y sólo masculló que se sacará una “extraordinaria reforma” para la transformación y modernización de las telecomunicaciones.
No obstante, sí abundó en que la propuesta del PAN, respecto a los integrantes de la Cofetel, es que estos deben permanecer en sus puestos por que hay experiencia y conocimiento del tema entre los actuales integrantes de ese órgano autónomo.
“Creemos que es fundamental que el órgano regulador en radiodifusión sea constitucionalmente autónomo porque va a ser el espacio donde las televisiones estatales o la televisión del Estado mexicano se van a concentrar, y no queremos que suceda como con la televisión mexiquense que se ha convertido no en un órgano de los ciudadanos mexiquenses sino en un órganos de comunicación social del gobierno de Estado, o lo que está sucediendo con algunos canales públicos como el Canal 11 en donde prácticamente la oposición ya no aparece; queremos que el órgano sea un órgano del Estado mexicano, y no un órgano de gobierno”.
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