FUENTE: PROCESO
AUTOR: ROSA SANTANA.
MÉRIDA, Yuc. La Premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta
Menchú Tum, consideró que aunque lamentable y dolorosa, la tragedia
ocurrida en Newtown, Connecticuc, es un gran desafío para el presidente
Barack Obama y el pueblo estadunidense en general, pues ese tipo de
sucesos son la consecuencia “normal”de una política basada en la guerra y
la venta indiscriminada de armas.
“Es lamentable, es doloroso,
pero esto es una realidad y ojalá que no sea el comienzo… sino que
realmente la gente empiece a retomar otra vez una articulación de una
educación que no se base en la guerra como el heroísmo más grande de un
país”, opinó.
Sobre Adam Lanza, el multihomicida, reflexionó:
“…
eso que antes de ir a matar a los niños de una escuela, matar a los
maestros, a lo mejor pensó en ser un ‘Rambo’, a lo mejor pensó ser un
héroe, a lo mejor pensó aparecer en las enciclopedias del mundo, porque
eso es parte de eso, porque hacer un crimen de ese nivel nadie lo va a
olvidar…”
Destacó que la solución a estos problemas está sólo en manos de los estadunidenses.
“Hoy
sí ellos están en la mira. ¡¿Cómo van a promover el desarme en Estados
Unidos?¡ ¡No el desarme en Irak o en otro país del planeta, sino el
desarme en Estados Unidos! ¿Cómo se va a explicar las armas en Estados
Unidos?”, cuestionó.
Menchú Tum destacó que “esto es un desafío
muy grande para el presidente Obama en su próxima gestión, pero también
es un desafío para todos los norteamericanos en general”.
Sobre
México, consideró que tiene la oportunidad de dialogar y de lograr
consensos en materia de seguridad, empero, advirtió que “es importante
una seguridad que no sea represiva, sino preventiva”.Aunque en ese
sentido, reconoció que en general Latinoamérica descuidó el aspecto de
la prevención en materia delictiva.
Asimismo, la guatemalteca,
quien dictó hoy una conferencia como parte de las actividades
programadas por el gobierno del estado para celebrar el próximo 21 de
diciembre el inicio de una nueva era en el calendario maya, criticó el
manejo catastrófico que mediáticamente se ha dado a esa fecha, pues ha
generado miedo e incertidumbre en la humanidad.
“La burla que se
ha hecho del calendario maya desde Hollywood, desde las televisoras,
desde los medios, desde la red social, desde luego un costo va a tener,
ese costo de credibilidad y de ética que está por los suelos”, condenó.
Al
término de su conferencia magistral en el marco del Festival de la
Cultura Maya 2012: El Tiempo, Menchú Tum pidió un gesto de expiación a
quienes corrieron la versión del fin del mundo.
“Pues también si
usted, dueño de un canal de televisión que se le fue la mano para
participar en el sensacionalismo, pida perdón al abuelo Sol y pida al
niño Sol que recicle su perspectiva de vida para la humanidad para los
próximos años venideros”, dijo.
Añadió que “aquí nadie está
blindado de hacer un acto de humildad en este fin de era para comienzo
de una. Y el comienzo de una, efectivamente, hay muchos misterios que
nosotros no somos capaces de ver porque nuestra espiritualidad es corta.
“Si
hubiéramos cultivado al máximo nuestra espiritualidad, tal vez
podríamos ser una luz para los demás, pero como no llegamos a eso,
entonces que cada quien sea una luz para sí mismo”, agregó.
Insistió
en que “el sensacionalismo nos ganó en esto. Lo bueno es que toda esta
expectativa se va a terminar el 21, así como lo están presentando, así
que ya el 22 podremos hablar los mayas y proyectar una nueva visión del
sagrado calendario y yo creo que esa es una parte negativa, pero la
parte positiva es que por lo menos nos dimos un chance de tener susto”.
Reflexiva,
comentó: “me da mucho gusto cuando la gente está asustada porque por
primera vez se da cuenta que puede morirse. A lo mejor se le puede
acabar todo y a lo mejor tiene tantos bienes y al final no sabe a quién
dejar porque se va acabar. Entonces, pienso que ahí es una lección muy
grande que se ha logrado en el mundo y es que la gente por primera vez
pensó de manera global en su propia existencia”.
Reiteró que “el
21 tomen un rato para dar gracias y pedir perdón. El 22 de diciembre
esperen la salida del Sol…”y exhortó a aprovechar esta ocasión para
proyectar un mejor futuro, pues “necesitamos explorar caminos que nos
lleven a recuperar la esencia del ser humano, la esencia de todo”.
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